¿El cannabis es legal en Italia?

El estado legal y las discusiones que rodean el cannabis en Italia se caracterizan por la incertidumbre. La verdadera naturaleza de las leyes y sus distinciones quedan poco claras. En Italia, las regulaciones del cannabis se pueden categorizan en línea general en dos grupos principales: uso médico y uso proprio, cada uno con sus requisitos y sanciones.

Uso Médico

El cultivo, la venta y la importación de cannabis médico está permitido, pero solo con la autorización del Ministerio de la Salud. Esta autorización se les otorga solo a aquellas empresas o instituciones que demuestren una buena conducta y que aseguren el uso de cannabis con objetivos profesionales. Los médicos autorizados por el Ministerio de Salud pueden recetar el cannabis por uso médico autorizado. Si el producto prescrito no está autorizado en Italia, pero en otro país está; el doctor italiano puede solicitar el Ministerio de Salud y la aduana para importarlo. Participar en estas actividades sin una autorización adecuada puede dar lugar a un encarcelamiento de seis a veinte años y una multa de 26.000 a 260.000 EUR.

Uso Personal

La situación legal llega a ser todavía más ambigua cuando se habla de uso personal. Vender cannabis en Italia es ilegal, pero se ha despenalizado. De todas formas, algunas empresas han aprovechado de la situación produciendo productos bajos en THC (el mayor compuesto psicoactivo de la marihuana). Las ventas están permitidas bajo la legislación industrial del cannabis, que permite el uso de cannabis con objetivos industriales como por ejemplo textiles, telas, jabón, alimentos y materiales de construcción. En septiembre 2021, el Ministerio de Salud declaró que el cannabis industrial podría utilizarse para el suministro de las empresas farmacéuticas con una autorización adecuada.

El cannabis puede usarse para objetivos industriales si el contenido de THC en inferior a 0.2%. Acuerdo a la ley 242 de 20216, si las autoridades encuentran a alguien con cannabis que contiene THC superior a 0.2%, pero inferior a 0.6%, no habrá repercusiones. Italia introdujo la ley 79 en 2014 que reclasificó el cannabis como una droga blanda. Aunque el uso personal es ilegal pero despenalizado, la posesión de cannabis para uso personal puede resultar en una multa, pero no en un delito grave. La cantidad máxima para uso personal es 1,5 gramos, y hasta que se respete este límite no habrá repercusiones graves, solo el riesgo de una multa. De todos modos, si la ofensa se repitiera muchas veces se podría llegar a medidas más estrictas.

La ley 79 es la que crea la ambigüedad que rodea el cannabis. Las consecuencias pueden ser diferentes dependiendo del lugar y de las personas comprometidas. A veces se puede emitir una advertencia verbal, mientras que otras veces se puede imponer una multa. Es aconsejable llevar solo una pequeña cantidad de cannabis a la vez y fumar en el interior en caso necesario.