23 nov 2020
La storia unica della regione Trentino Alto-Adige conferisce alla città di Bolzano una cultura curiosa ma assolutamente avvincente. Nata dalla fusione tra la tradizione italiana e quella germanica, mostra i dettagli di questo eclettico mix non solo nei nomi delle strade, ma anche nell’architettura, nel cibo e soprattutto nella lingua. Nelle piazze si sente parlare tantissimo sia in italiano che in tedesco. Il paesaggio della città è reso ancora più pittoresco dalla corona montana di Dolomiti, dichiarate dall’ Unesco Patrimonio dell’Umanità, che la circondano. “La grande Strada delle Dolomiti” e “Il cuore delle Dolomiti” sono infatti tra i tour privati proposti da myTour che permettono di assistere ad una sequenza di paesaggi mozzafiato unici al mondo. Bolzano si presenta come una città silenziosa e ordinatissima, caratterizzata dai ritmi della natura che creano un’atmosfera molto rilassante. Definita anche la Porta delle Dolomiti per la sua posizione strategica, offre diverse attrazioni turistiche in grado di incantare anche viaggiatore più esigente.
En la esquina suroeste de la céntrica Piazza Walther se encuentra la Catedral (siglos XIV-XV), adornada por una elegante aguja de 65 metros de altura, de filigrana abierta tallada en piedra arenisca, construida entre 1504 y 1519 y que se eleva sobre un llamativo tejado de tejas con motivos geométricos. Dé la vuelta a la iglesia para ver sus portales: un portal románico con leones que sostienen columnas (y un fresco de la Virgen María de 1475); una hermosa puerta de bronce; y en el lado norte, la grabada Puerta del Vino. Se trata de uno de los portales altogóticos más bellos del Tirol. En el interior hay un púlpito gótico tallado en piedra arenisca y sostenido por un solo pilar, un altar barroco de mármol policromado y una capilla barroca con frescos del siglo XVIII. En las otras paredes hay frescos de los siglos XIV y XV.
La Piazza delle Erbe puede describirse como el corazón comercial de la ciudad, ya que desde 1295 alberga el colorido mercado de verduras y frutas donde aún hoy compran todos los habitantes de Bolzano. Para saborear el ambiente tranquilo de la ciudad, pasee y mire a su alrededor, continuando hacia los famosos soportales. No hay que perderse en Bolzano la Fuente de Neptuno, considerada una de las cien fuentes más bellas del país. Rebautizada por los lugareños Gabelwirth, o "el posadero del tenedor" por el tridente que sostiene en la mano, fue construida en 1725 en mármol y bronce. El edificio que hace esquina con la Via Museo albergó en su día el hotel "Al Sole", donde se alojaron muchos personajes importantes, como el emperador austriaco José II, Mozart y Goethe. Sigmundskron (La Corona de Sigmund) El castillo de Firmian es el nombre sudtirolés derivado del antiguo conde del Tirol Sigmund el Rico, que lo poseyó desde 1473. A pesar de su apodo, el conde perdió la propiedad del castillo, que pasó de mano en mano y cayó en el abandono. Aunque quedan pocos elementos del edificio original, sigue considerándose uno de los edificios arquitectónicos defensivos más importantes del Trentino. Erigido en una posición panorámica y estratégica, en 1957 fue escenario de la protesta de los sudtiroleses por la autonomía. Hoy su propietario es Reinhold Messner, que ha convertido la casa solariega en museo. La colección del alpinista presenta una imagen completa de la relación entre los Dolomitas y las personas que intentaron conquistarlos, enriquecida con fotos y recuerdos. Lago de Carezza Entre las cosas que hacer en Bozen, no se puede dejar de mencionar el lago de Carezza. Llamado el lago mágico de los Dolomitas porque cambia de color, ya que según la leyenda una ninfa vive bajo el agua, tiene unos 300 metros de largo y unos 140 metros de ancho. Se encuentra a 1.520 metros de altitud, rodeado por el hermoso bosque de Latemar, y se llama Lec de Ergobando (lago del arco iris) en ladino.
Sus aguas cristalinas reflejan los gigantescos macizos del Catinaccio y el Latemar, por lo que se recomienda rodearlo y verlo desde todos los ángulos. Por su espectacularidad, es una de las primeras paradas del recorrido de la "Gran Ruta de los Dolomitas".