2 ago 2022
Los Museos Capitolinos constan de dos grandiosos edificios, uno medieval y otro moderno de uso burocrático. El Palazzo Nuovo alberga importantes bronces, mientras que en Piazza del Campidoglio encontrarás a muchos turistas empeñados en fotografiar la obra de Miguel Ángel dedicada a esta emblemática plaza, que Sixto IV le encargó como parte de su donación para la expansión de Roma como capital entre 1471 y 1484 d.C.
La segunda mitad de los museos incluye información de fondo sobre lo que ocurre en la actualidad y un poco de historia sobre cómo empezó todo.
Los Museos Capitolinos abren todos los días de 9:30 a 19:30 (excepto festivos: 1 de enero, 1 de mayo y 25 de diciembre). La entrada a los museos cuesta 16 euros para los adultos (15 euros para los residentes), con acceso a ambos edificios. Las visitas guiadas son una excelente manera de entrar en los museos menos conocidos de Roma. Los Museos Capitolinos ofrecen una visita guiada gratuita que te llevará a través de la historia, incluyendo información sobre todo tipo de obras de arte e incluso sobre lo que se expone en la Basílica de San Pedro. Descubrirás por qué el Papa Sixto IV encargó a Miguel Ángel esta obra en concreto y cuántas losas de mármol componen el suelo justo bajo tus pies.
Al entrar en el museo, tu mirada se verá inmediatamente atraída por una de las esculturas más famosas de Roma: la Lupa Capitolina. Esta enorme pieza se encontró en el antiguo Foro y data de hace más de 500 años.
La primera planta alberga otros bronces originales donados por el Papa Sixto IV junto con muchas piezas que fueron donadas posteriormente; es realmente un honor para cualquier visitante entrar en este lugar histórico donde el arte cobra vida en cada rincón.
La segunda planta del museo alberga algunas pinturas increíblemente famosas de artistas como Titano, Tintoretto y Rubens. Además, aquí también se exponen dos obras de Caravaggio. En el interior de este edificio, uno tiene la impresión de realizar un impresionante viaje a través de la historia de Europa, con todos sus diferentes estilos artísticos se encuentra de todo: desde esculturas clásicas de mármol o bronce hasta impresionistas modernos, como Claude Monet, cuyas obras están expuestas, junto con la obra maestra del pintor impresionista Pierre-Auguste Cotan "On se promène" ("Caminando").
A los antiguos romanos les encantaba leer y escribir. Su biblioteca en los Museos Capitolinos no solo alberga algunas de sus posesiones más preciadas, sino que también ofrece una vista impresionante de uno de sus mayores símbolos: el Foro Romano.
En el sótano de este museo hay un túnel subterráneo inutilizado que conecta dos de los edificios de Roma, ¡ambos construidos en lo alto hace siglos por el mismísimo emperador Augusto! Podrás hacer fantásticas fotos mirando hacia abajo, a lo que antaño estuvo lleno de estanterías y atriles de lectura, mientras contemplas lugares emblemáticos como la Basílica de San Pedro al otro lado de su ventana.